Mari González, viuda de Diego Mateos, y Alfonso Mateos, su hijo, vecinos de La Palma, villa de Dª Elvira de Ayala, por si y en nombre de Gonzálo, Pedro y Marina, también sus hijos, menores de edad,venden a Pascual Martínez, zapatero, y a Magdalena García, su mujer, vecinos de esta dicha villa, un pedazo de tierra para pan llevar lindante con tierra de Bartolomé Camacho y tierra de Antón Pérez, vecino de Villalva, y con viña de los dichos compradores y el camino de Sevilla, por precio de 570 mrs., que 2 blancos valen 1 mr., con ciertas cláusulas y condiciones. Pasó ante Alfonso Arias, escribano público de La Palma por su señora, Elvira de Ayala